sms sudamerica logo

Episodio 7: Máquinas Creativas ¿Se nos fue la mano?

¿Puede una IA escribir un poema que te haga llorar? ¿Pintar un cuadro que colgarías en tu casa? ¿Crear una película que te deje pensando por días?

La respuesta corta: sí, puede.
La respuesta larga: sí, puede… pero ¿debería?

Estamos en un momento extraño de la historia: las máquinas están invadiendo territorios que creíamos exclusivamente humanos. No solo suman, calculan o automatizan… ahora también componen, escriben, diseñan, editan y actúan. Y lo hacen bien. A veces, sorprendentemente bien.

Entonces… ¿qué hacemos con eso?

Del algoritmo al aplauso

En 2022, un generador de imágenes ganó un concurso de arte. En 2023, se estrenaron las primeras canciones con voces creadas 100% por IA que llegaron al top de Spotify. Y en 2024, probablemente hayas leído un poema o una nota firmada por una IA… sin saberlo.

Y aunque para muchos esto suena a ciencia ficción distópica, para otros es simplemente la evolución natural de las herramientas creativas. ¿O acaso no hubo polémica cuando apareció la fotografía? ¿Y luego el cine? ¿Y después Photoshop?

Spoiler: el arte no desapareció. Se transformó.

Pero… ¿una máquina puede sentir?

Acá es donde el debate se pone jugoso. Porque sí, una IA puede escribir algo que “parezca” poético, conmovedor o visualmente poderoso. Pero no lo hace desde la experiencia. No sabe lo que es amar, perder, crecer o temer. Solo aprende de miles de ejemplos humanos y construye algo que nosotros, los humanos, lo sentimos así.

¿Entonces el arte sin intención sigue siendo arte? ¿Y si la emoción que genera es real, importa si fue escrita por una máquina?

La cultura como espejo de lo humano… ¿o del código?

Estamos entrando en una etapa donde los límites se borran. Las canciones que escuchás, los textos que leés, las imágenes que compartís… podrían haber sido creados por una persona o por una IA entrenada para imitar el alma humana.

Y eso nos lleva a una pregunta profunda: ¿Qué valoramos más: el resultado o el proceso? Porque tal vez la canción de IA que te hizo llorar no tiene historia detrás. Pero vos la hiciste tuya igual. ¿Eso la vuelve menos válida? ¿O solo distinta?

¿Se nos fue la mano? ¿Es el fin del arte? Para nada.

Lo que está cambiando no es la necesidad de crear, sino las herramientas que usamos para hacerlo.
Así como una guitarra eléctrica no quitó mérito a una acústica, una IA no le quita valor al arte humano. 

Pero sí nos obliga a redefinir qué entendemos por creatividad.

Nuestro papel en esta nueva frontera creativa

En SMS Sudamérica, no solo exploramos cómo la IA optimiza procesos y resuelve problemas complejos. También nos interesa cómo transforma la cultura, los lenguajes y las formas de expresión.

Estamos atentos al impacto que tiene en la industria creativa, reflexionamos sobre su rol en la generación de contenido y comunicación, y acompañamos a empresas y equipos que quieren incorporar IA creativa sin perder lo que los hace únicos.

Porque creemos que la inteligencia artificial no reemplaza la chispa humana. La amplifica, la reinterpreta… o la desafía. Y en todos los casos, eso abre nuevas puertas.

¿Querés explorar el lado creativo de la IA sin perder tu esencia? ¡Contáctanos! Estamos listos para ayudarte a crear sin límites, pero con conciencia.

Nota por: María Dovale Pérez